Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de agosto, 2017

EL POLI Y LA GITANA

Pasaba todos los días bajo aquella ventana cuando iba o venía de la comisaría, y raro el día que no oía cantar aquella voz tan potente, tan bonita y tan fina; se paraba unos segundos a escucharla, y al día siguiente, otra vez igual, ¿es que estaba siempre cantando esta chiquita? Un día preguntó en el bar de enfrente: - ¿Quién vive ahí en ésa casa? Y el dueño del bar le contestó: - La solterona Nicolasa, mire, aquella que sale ahora mismo por la puerta - La mar, ¡que tía más fea!- dijo el policía. Y luego pensó "¿Cómo es posible que salga una voz tan bonita de ésa mujer?" La verdad es que después de esto perdió interés y ya a penas se paraba cuando la oía cantar. Un día estaba de servicio cuando vio venir un coche a todo gas, le hizo un alto y lo paró: - Vamos a ver, ¿a dónde vas tan deprisa, niñita? -¿Deprisa?, pero señor Guardia, si yo iba normal. - ¿Normal? Tenías que ir a ochenta e ibas a ciento veinte, y encima ibas hablando. - ¿Hablando con quién...